Yo he dejado de sufrir frente a los horizontes siniestros del tiempo. He perpetuado el diapasón eterno de lo indescifrable, Sobre la arena del tiempo me aprendí mi rostro magullado de heridas Me aprendí el silencio: de memoria. Tengo un espíritu forjado de ímpetu en mi memoria, desprovista del tiempo, Memoria que no es nada sin el universo, y que se ancla en él, Soy un errante de la existencia que lucha retorcido hacia sus enigmas. Yo he dejado de sentir compasión por los devenires de las nebulosas. Acumular saberes en mi conciencia ha fortalecido mi esencia: El conocimiento se limita a sí mismo, la realidad es sólo una idea, Todo: es pensamiento. El espacio – tiempo se crea en quien lo percibe, Y estoicamente me he forjado una existencia con sentido. La perpetuidad del yo provoca la ilusión de la realidad Mientras camino desolado por un recuerdo que es un sueño. Yo he sufrido, yo he sufrido, por los amaneceres teñidos de negro Me he dejado soli...
Estoy sentado. Toda la familia está alrededor. Lo veo alejarse caminando con dificultad. Tiene un año y algunos meses. Él es mi sobrino. Lo veo a lo lejos pero, cada vez que me ve, sonríe como alegrándose de un chiste que mi cara aún no termina de decir. A mí no me causa gracia. Esta vez quería caminar al patio. Para ello, debía bajar un pequeño escaloncito de unos diez centímetros. Me muestra su mano moviendo sus deditos, indicándome que le sostenga para poder bajarlo. Lo ayudo casi sin pensar, casi sin conmoverme. Constantemente me burlo de mis tíos y familiares: “¿Qué tan tierno le ven? Es sólo un niño, casi bebé”, siempre les digo, haciéndome el duro. Pero algo ha cambiado. A mi edad, comienzo a sentir levemente los impulsos altruistas de querer dejar descendencia. Aún no sé por qué: comenzó a serme hermosa la idea de enseñar, de ser un ejemplo para alguna persona y de apoyar con cada día de mi existencia al desarrollo de una pequeña personita. Entonces, sentado, lo observo al...
Ellos reflejan el pensamiento hacia el cielo Fiel copia de una sombra, Una luz que se encontró dormida Y yo que encontré en la oscuridad del firmamento, Detrás de ti, soñolienta, Narcisismo de una sonrisa anhelada al perecer, Ya las sombras del reflejo nos encuentran En el lago, Cuando en recuerdos te pierdes deambulando Bajo un musgo de años perecederos. Espejo es de lo que somos Perdidos en la ilusión del tiempo Sucumbidos por los recuerdos del futuro Presagios de la emergencia del caos, Y bajo mis pies te mezclas Te aparentas Te marchitas de nuevo, Volviendo en ti, Encontrándome dormido en una tumba Pensando en el tiempo, Reflejando mi recuerdo en un lago perdido Mientras el tiempo se congela y me acuerdo de ti. Peor ya es el tiempo, Y no me acuerdo de lo que pasó. Sólo la eternidad despojada de tormento Camina ciega por dentro de nuestros cabellos Haciéndolos caer en el otoño actual De tus recuerdos, Reflejados en e...
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