Lo que Sucede cuando no Mentimos...
Decir
las verdades lenta y claramente no siempre conduce a lo que uno esperaría. Las
verdades del alma son lo que uno más sustenta, lo que más atesora, y es lo más
valioso que podemos entregar a las personas que queremos. La verdad no
discrimina, no difiere sus sentidos hacia las personas a las que nos
enfrentemos. Si sientes algo, sólo debes decirlo, con todo tu corazón y con
todas tus fuerzas, para que así puedas caminar con la frente en alto sin pensar
que pasaste por la vida mostrando sólo una versión de ti, una imagen, un
espejo. “Di tu verdad lenta y claramente” decía el Desiderata. La sinceridad es
el don más valioso de las personas, pues en él podemos ver hacia dentro de sus
espíritus, compartir los momentos y los deseos, y ser libres en este camino que
llaman vida. La verdad. La verdad es que no siempre es bien recibida. Solemos
ser acusados, juzgados, discriminados, odiados y a veces despreciados por decir
la verdad. Pero NO debes nunca sentir vergüenza por lo dicho. Nunca te retractes
de nada de lo que de tu corazón ha salido. Si bien es cierto que la verdad a
veces no es bien recibida, también es cierto que tarde o temprano las personas
se darán cuenta de que no mentías, de que les eras sincero(a), y que entregaste
lo único que sinceramente podías entregar: tu espíritu. Lo que sucede cuando no
mentimos…
David QL! sabio!
ResponderEliminargracias compadre
ResponderEliminar