Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2019

Encontrarnos

Imagen
¿Dónde hemos estado? ¿Quiénes hemos sido?  A veces cometo el error de querer demasiado a los demás, de dar todo por ellos, de dar todo mi tiempo para ellos, pero no de dedicar tiempo para mí mismo.  Estos días hay una tormenta en todo el valle. Tornados, vientos, lluvia. Los espíritus están inquietos, hablan a gritos y casi nadie parece escucharlos. Pero en las noches de luna, con esos millares de estrellas creadoras de realidad, dejo de ser yo y los espíritus hablan en la oscuridad.  Cada noche es un encuentro conmigo mismo.  Pocas veces me pongo a pensar en lo que he logrado, en lo que puedo hacer, en los talentos que he podido desarrollar. Sobretodo, porque casi nunca me los recuerdan. Entonces, sólo me dejo fluir y no me doy cuenta que lo mejor que puedo hacer es entregar todas las energías que tengo hacia mí mismo. Mi guitarra, mis manos al escribir, mis ojos al hablar con el corazón, mis dedos al dibujar.  Ahora la vida ha hablado. M...

La Lluvia de Mayo

Todas las noches blanquecinas se ha vuelto largas y entusiastas. Casi no veo la luz del sol, la evito porque me marca la piel. Vivo de noche, pienso de noche, siento de noche. Durante el día, camino perplejo y pensativo, mostrando aprecio y ternura por el mundo que se aparece frente a mis ojos.  Soñoliento, sigo a mi espíritu hacia las personas que quiero. Me esfuerzo por abrir mi corazón, de a poco, para superar mi, a veces, melancolía. El dolor físico de los cálculos del mes pasado me tocó fuerte, me remeció, me hizo acordarme de lo los sentimientos que no tengo que reprimir, y que la rabia que a veces muestro no es mía, no soy yo.  Han habido grandes momentos, todos de noche. Una cena entre colegas, se llena de alegría y fraternidad. Una tocata de jazz llena mi espíritu de fuego. Una ceremonia de premiación, sublime, me permite mostrar todos mis sentimientos por primera vez, frente a todos, en una canción en la que demuestro toda mi emotividad, al mismo tiempo que ...

El viajero del Tiempo

Se llama Kalistero... el viajero del tiempo... Cuando se encuentran nuestras palabras en el instante en que las lees, se unen dos tiempos distantes en la mágica unión del comunicar.  Hay un ser, desde el pasado,  que emerge a través de los signos muy por debajo de la realidad.  Viene desde las profundidades de la consciencia a hablarte y unirse con el presente.  Cuando lees las palabras que de ti han salido,  la magia de la comunicación comienza a fluir:  Pasado y presente, latentes, encuentran su unión en tu mente. 

The Union

There is no link between homeless minds, with no eyes, with no cries. There is no spot in heaven when we can find a big hole in the sky, in our blindless sights. There is no shadow in the giant souls: a careless hug given without a single worry... There is no line between our spirits, and love is making the eyes of our lives, due to the mirros of heart, due to the floor of the feet. There is, only, the closeness of us.

Lluvia Interior

Cada día va pasando, cada vez, con menos lentitud. Cada segundo que pasa acaricia mi soledad. Cada noche que se posa me lleva de nuevo a dormir. Pero yo, aquí dentro, quiero sentir la lluvia caer dentro de mí, que lave cada ventisca, y cada herida, que el agua acaricie mi interior como un abrazo lo haría por fuera. Las nubes bajas, en este otoño, se posan en mis hombros, me tocan despistadas. La soledad se ha vuelto la mejor consejera, la única consoladora. ¿Cuándo Dios sentirá su soledad?

El Muro

He tratado de superar mi soledad en todas las almas que he podido. He tratado de comunicarme transparente con las miradas que en mi camino se han topado. Pero hablar con el otro es como hablar conmigo mismo encontrado en el cruce de mi propia soledad. No hay escapatoria, no hay retorno, no hay comunión ni encuentro de la emergencia de la realidad. Incluso el lector de mi confesión: soy yo mismo.

Comunicarme conmigo mismo

Existe un lago perdido entre las cumbres del firmamento, acaecido en los tormentos de las alturas en donde las miradas tuyas y mías, de quien escribe y quien lee, se reflejan y se vuelven una. Porque cuando vuelvo a mí mismo y trato de encontrarme en las palabras, busco en el espacio del tiempo un atisbo de cercanía conmigo mismo. Y ahora que el lago se ha marchitado y me encuentra pensativo en tu mirada me puedo acercar un poco a ti, que lees, ensimismado, las palabras que tú mismo has escrito. Tu único registro es la soledad, desde donde hablo, pienso, siento, existo: tú y yo: solos.