La Sensación Sin Nombre


Corren desolados los pájaros sin sentido
Perdidos entre sus propias sombras desoladas,
Caí, cabizbajo,
En una sombra de hielo,
Volando entre las cacofonías irresolubles del ser.

Yo perdido, una vez más,
Me he posado en el silencio.
Hundido en mi propio pensamiento
Encuentro un templo perdido en las nubes.

Caigo entonces en la penumbra de mis deseos,
Navegando entre pasillos oscuros que se parecen a mi rostro.
Las historias de mi lamento,
Se parecen entre sí,
Se aparecen entre los muros
Se aparecen entre los suelos.
Caigo entonces en la penumbra de mis recuerdos,
Dejando la mirada incrustada en días pasados,
Y contagioso a mi destino,
Me invento un ser que se parezca:
Al pasado y al futuro, que intento rearmar.

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