Extraviada

Te conozco, olvidada,
Te he conocido siempre.
Aléjate,
Despistada,
Y no te contengas
Pues en la vida que se te va
Se contiene, tu sonrisa.

No te quedes, cabizbaja
Presa del olvido
Y recuerda tu sonrisa
Aun cuando no tengas un espejo,
Abre tus ojos al cielo
Y llora con la lluvia.

Siéntete viva, dentro de ti.

No contengas tu corazón,
Cerrada al egoísmo
No se puede estrechar una mano
Con un puño cerrado,
No desvíes tu mirada
Hacia un objeto inexistente
Que en el nido del desdén
Tú no me encontrarás.

No te asustes, olvidada,
Si te digo que te quiero
Y corras por un pasillo
Que sólo te encerrará,
No vivas presa de la desconfianza
Que nada busco: sólo encontrarte.

No te pierdas, extraviada
En una isla de egolatría,
Donde tu corazón endurecido
Sólo se posará en el silencio…

En fin,
Cariño.

Mira hacia el cielo
Y búscame tu rostro:
Anhela tu ser tuyo
Y encontrarás el mío.


Creado por David Rodríguez.
Propiedad Legal y Derechos Reservados.

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